Mantén el equipo alejado del polvo y la humedad: guarda tu equipo en un lugar seco y alejado del polvo y la humedad para evitar daños a largo plazo.
No sobrecargues el equipo: evita sobrecargar tu equipo de Juego y asegúrate de que esté bien ventilado para evitar el sobrecalentamiento.
Actualiza regularmente el Software y los controladores: mantener actualizado el Software y los controladores de tu equipo puede mejorar el rendimiento y prolongar la vida útil del equipo.
Usa protectores de pantalla y fundas: proteger tu equipo con protectores de pantalla y fundas puede ayudar a evitar rayones y otros daños.