HHD

El rendimiento de un Juego es algo que preocupa a muchos Jugadores, especialmente a aquellos que invierten en equipos de alta gama. En la búsqueda de una experiencia de Juego más fluida, se suelen considerar muchos factores, como la Tarjeta gráfica, el procesador y la memoria Ram, entre otros. Sin embargo, hay un factor que a menudo se sobrevalora y que realmente no tiene mucho que ver con la velocidad de los Juegos: la velocidad del disco.

En términos de FPS (frames por segundo) o gráficos, la velocidad del disco no tiene un gran impacto en el rendimiento de los Juegos. En otras palabras, no importa si tienes un Hdd ( Disco duro), un Ssd (unidad de estado sólido) o un NVMe (Non-Volatile Memory Express), ya que ninguno de ellos afectará significativamente a la velocidad del Juego en sí.

El lugar donde sí se nota la velocidad del disco es en la carga del Juego. Un Ssd o un NVMe serán más rápidos para cargar los Juegos que un Disco duro tradicional. Por lo tanto, si te molesta esperar mucho tiempo para que un Juego se cargue, invertir en un Ssd o un NVMe puede ser una buena opción.

Sin embargo, una vez que el Juego se ha cargado, la velocidad del disco no tendrá ningún impacto en la velocidad de los FPS o los gráficos. Lo que realmente importa aquí son los componentes internos de tu equipo, como la Tarjeta gráfica, el procesador y la memoria Ram.

En conclusión, aunque la velocidad del disco puede ser importante para la carga del Juego, no tiene un impacto significativo en el rendimiento de los FPS o los gráficos. Si deseas mejorar la velocidad de tu Juego, deberás considerar otros factores, como la actualización de la Tarjeta gráfica o la memoria Ram.

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